Pero antes de sumergirnos, ¿te ha pasado esto? Imagina invertir tiempo y recursos en algo prometedor, pero que no muestra resultados tangibles de inmediato. ¡Es justo lo que está pasando con la IA en muchas empresas! Según un informe del MIT, el 95% de las compañías no ven impacto medible en sus finanzas a pesar de billones invertidos. Pero, ¿y si el problema no es la tecnología, sino cómo la estamos midiendo? La IA no se trata solo de cifras, ¡sino de cómo nos transforma!
¿Por qué el mito del ROI en IA distrae a los líderes de RH?
Recientemente, en una llamada con directores de recursos humanos de Fortune 500, una ejecutiva compartió su frustración: su equipo le pedía demostrar el retorno de inversión (ROI) en iniciativas de IA. ¡Se sintió desconcertada! Resulta que no era la única. La obsesión por los números puede nublar lo esencial. Como dice Teuila Hanson, directora de personas de LinkedIn, en lugar de buscar ROI, los líderes deberían preguntarse si están listos para desafiar el status quo y empoderar a sus equipos. ¡Es un cambio de mentalidad! Piensa en cómo, en la vida diaria, lo más valioso—como la confianza o la creatividad—no se mide en dólares, pero transforma absolutamente todo. Integrar la IA con propósito es clave.
¿Cómo florece la capacitación y confianza en IA?
¿Sabías que el 85% de empleadores que usan automatización o IA reportan ahorro de tiempo y mayor eficiencia? ¡Increíble! Pero el secreto no está en la tecnología sola, sino en cómo la integramos. En empresas como LinkedIn, más de tres cuartas partes de los empleados confían en usar IA gracias a capacitación específica y políticas claras. Es como aprender un nuevo idioma: no se trata de reemplazar tu voz, sino de ampliar tu capacidad para conectar. Aquí me pregunto: ¿cómo construimos confianza día a día? Es en esas formaciones prácticas, en reglas transparentes, donde los equipos descubren que la IA es aliada, no juez. ¡Imagina juntas innovando, con herramientas que liberan horas para lo humano—ese ingenio colectivo que solo brota cuando respiramos! La adaptabilidad humana marca la diferencia.
Tres pasos prácticos para integrar IA en empresas
Primero, define principios de IA con transparencia. Segundo, invierte en formación continua—no solo técnica, sino en habilidades blandas como resolución de problemas. Tercero, fomenta una cultura de experimentación, donde errar sea parte del aprendizaje. ¡Como esos paseos espontáneos donde exploramos caminos nuevos sin temor a equivocarnos! La IA puede ser la brújula, pero nosotros elegimos el rumbo. Chats breves para compartir ideas o pausas reflexivas entre reuniones: así se teje la confianza. Integrar IA con enfoque práctico transforma el trabajo.
Reflexión final: IA y futuro con propósito humano
Al final, no es tecnología versus humanos, sino aliados para crecer. La IA nos ayuda a enfocarnos en lo que importa: conexiones auténticas, innovación con sentido, bienestar real. ¿Visualizas un mañana donde el trabajo fluye con propósito y cada persona aporta su mejor versión? Como ese momento al atardecer que invita a reflexionar y respirar, recordemos que los cambios profundos nacen de confianza y una chispa de esperanza. ¿Listos para escribir juntos esta próxima página? Integrar IA con humanidad es el camino.
Fuente: HR leaders say AI ROI is a red herring. Here’s what firms should focus on instead, Fortune, 2025/09/08 11:31:56