
¿Y si supiéramos predecir los pequeños tropiezos de crecimiento de nuestros hijos?
Hoy, mientras observaba a un grupo de niños explorando senderos en el parque después de clases, recordé aquella primera vez que mi pequeña tropezó al aprender a andar en bicicleta. Quería sostenerla sin asfixiar su aventura. Justo entonces, descubrí cómo Geotab usa inteligencia artificial para anticipar averías en camiones y hacer las carreteras más seguras. La vida parental tiene mucho en común con esta tecnología ambiciosa, ¿verdad? Observar esos pequeños detalles que marcan la diferencia entre un viaje tranquilo y un contratiempo inesperado.
Vivir cerca de la escuela nos da esos momentos mágicos para observar y conectar mientras caminamos juntos cada tarde. Es en esos breves travesías cuando realmente noto las señales sutiles que me hacen pensar en cómo podemos aplicar estas innovaciones tecnológicas para criar con más intención y prever los pequeños desafíos que vienen.
¿Qué señal te sorprendió hoy mientras caminabas con tu pequeño? A veces los indicadores más importantes no vienen de pantallas, sino de gestos y palabras que podrían ser clave para entender su mundo.
Prevención inteligente: Menos averías, más alegrías

Según lo que compartió Edward Kulperger, director de Geotab, su plataforma lleva más de una década analizando datos para predecir fallos en vehículos antes de que ocurran. Imagina esto: cuando un sensor detecta una fluctuación de voltaje que anuncia un alternador defectuoso, los técnicos actúan con tiempo. En casa, ¿no nos pasa igual? Un bostezo excesivo durante los deberes, una mirada huidiza al hablar de la escuela, o ese momento en que reduce su energía de repente… ¡son nuestras alertas internas de que algo necesita atención!
La investigación de Deloitte muestra que el mantenimiento predictivo reduce averías en un 70%. Nuestra misión no es vigilancia obsesiva, sino observar esos pequeños signos que nos dicen: ‘Hoy necesita un abrazo extra, no más pantallas’. Es como notar que tu hijo cambia de conducta antes de que cualquier problema crezca, permitiéndonos actuar con anticipación.
Prueba esta idea para reflexionar: La próxima vez que tu hijo parezca frustrado, pregúntale ‘¿Qué haría un superhéroe para calmarse?’. Es como revisar el aceite del camión, pero con más risas. Transforma señales en oportunidades para reconectar, no en alarma. No siempre necesitas tecnología avanzada para entender qué necesitan.
Conversaciones que dan marcha atrás: Escucha activa como sistema de navegación

Geotab recopila información de 100 sensores distintos para prever problemas. Nosotros, como padres, tenemos un sistema igual de poderoso: las conversaciones cotidianas. Durante una merienda de frutas frescas —nada complicado, solo manzanas cortadas y un cuento rápido— mi hija reveló que temía un proyecto escolar. Era como esa alerta que evita una avería en carretera: costos diarios de $488 a $760 por camión en paro, según Vehicle Service Pros. Pero para nosotros, el verdadero costo sería ver su confianza erosionada.
En familia, el ‘costo’ de no escuchar son las grietas en la confianza. Como muestran las cifras, escuchar previene crisis mayores, igual que en los talleres mecánicos donde ‘la IA potencia a los técnicos, no los reemplaza’, como destacan en Forbes. La escucha activa es esa herramienta básica que a veces olvidamos pero que funciona mejor que cualquier algoritmo.
Integra esto suavemente: Al terminar el día, juega ‘una alegría y un desafío’. Es tu radar emocional personal. Pregúntale: ‘¿Qué te hizo sonreír hoy?’ y ‘¿Qué bache superaste?’. Escuchar atentamente sus respuestas es tan importante como cualquier dato que puedas recolectar. A veces, cuando paramos de escuchar con el corazón, solo escuchamos palabras.
El conductor siempre eres tú: Tecnología como copiloto, no como timón

Cuando Uptake y Geotab unieron fuerzas, no fue para automatizar talleres, sino para dar a los gerentes de flota ‘contexto adicional’ con datos. Así debe ser con las herramientas digitales en hogares: aliadas, no dueñas. Recuerdo cuando una app sugería bloquear pantallas al atardecer… pero ese día era el cumpleaños de un abuelo, y celebramos con videollamada. ¡La flexibilidad humana siempre gana! Igual que los padres del barrio que regulan el uso de tablets según las actividades del día, equilibrando tecnología con tiempo en familia.
Reflexiona aquí: ¿Alguna vez ajustaste una ‘regla digital’ por un momento especial? La verdadera resiliencia infantil no nace de algoritmos, sino de ver que tú, como padre, equilibras lógica y corazón. Al igual que los mecánicos deciden cuándo limpiar el filtro de partículas, nosotros decidimos cuándo un juego educativo vale una hora extra de tablet. La tecnología muestra el mapa, pero tú, con toda tu sabiduría y cariño, conduces el viaje.
Cuando nuestras hijas y hijos vean cómo usamos la tecnología con discernimiento, están aprendiendo una de las lecciones más importantes para su futuro: que las herramientas existen para servir a los humanos, no al revés. La empatía real siempre supera cualquier automatización.
Ruedas que nunca paran: Cultivando resiliencia para el largo recorrido

Geotab logra que flotas recorran ‘el triple de kilómetros entre averías’, según FleetCarma. Nuestro motor interno como padres es similar: queremos hijos que sigan rodando tras cada tropiezo. Pero ¿cómo? Con permitirles reparar juguetes rotos sin intervenir, dando espacio para que resuelvan conflictos en el parque. Esa autonomía es el aceite que lubrica su confianza. En algunos barrios hay talleres comunitarios donde los niños pueden crear y construir, reforzando esa misma autonomía en un entorno social.
Piensa en esto: Un estudio de CDK Global Heavy Truck señala que el mantenimiento predictivo ‘extiende la vida útil de los vehículos’. En crianza, anticipar necesidades —como notar que un niño necesita más movimiento antes de hacer tareas— previene que se ‘cale’ su curiosidad. Propón un reto: La próxima semana, reemplaza un ‘no’ digital con ‘¿Qué crees que pasaría si probamos esto juntos?’. Observa cómo su ingenio florece. A veces, el mejor GPS para guiar a nuestros hijos está en escuchar sus preguntas y deseos.
En casa, celebramos cada pequeña victoria con tanto entusiasmo como si hubieran completado una gran expedición. La infancia es un viaje sin prisa, lleno de desvíos inesperados y paisajes preciosos. Solo necesitamos mantener nuestros sentidos afinados para disfrutar cada tramo del camino y recordar que a veces, lo más sencillo como un paseo por el parque puede ser el mejor mantenimiento emocional que podamos ofrecer.
Fuente: Geotab Says AI Can Reduce Fleet Breakdowns And Make Road Use Safer, We and the Color, 2025/08/30
